el destino está mostrandome sus caminos...
la música está a lo lejos... tan lejos... igual que mis recuerdos...
los demonios acuden a las enseñanzas, mientras los ángeles, tentados, distraidos e ingenuos, los contemplan, esperando aprender algo de lo que dicen...
me detengo solo para mirar un momento hacia atrás... mis ropas han caído, mi piel cambia, el brillo de mis ojos es diferente...
mientras me libero, veo como los demás entran a sus jaulas...
alguien una vez me dijo, yo seré el viento que te de impulso para volar...
aquel fue aún más importante... abrió la puerta de mi jaula...
por más que grite, por más que llore... aquella alma solo lo hizo para liberarme... aunque sabia que con eso yo lo odiaría... que dejaría de cantar para él...
antes de salir, debo confesar... tuve que cambiar mis plumas, por unas más fuertes...
transformando mi ser... ya no siendo un simple y melodioso canario...
el impulso, llegó de muchos rincones... la niña de mi vida salió a mi encuentro... desde hace mucho que esperaba mi llamado...
el mundo puede ser un lugar peligroso... aún no se volar... aún doi saltitos perdidos entre los gatos, entre mis depredadores... conocí un mundo tan lejos de los barrotes... quizás muera pronto de hambre y de sed...
el pájaro perdío su voz... ya no tiene a nadie que cantarle...