las preguntas llegan claras a la mente de esta mujer. escribe sus conclusiones y luego deja ir...
mis sentimientos dejaron de importar. no porque sean ridículos, sino porque no me están llevando a ninguna parte... ni siquiera ya a la muerte ansiada...
no quiero llegar a ser quién no soy por verguenza a lo que los demás piensen de mi, pero hay que admitir que siempre da miedo... ser sincera no siempre tiene una recompensa, pero eso yo ya lo sabia hace mucho tiempo. ser como soy me ha traido problemas, y también me ha trído grandes recompensas, como la gente que hoy quiero...
es justo cambiar por otra gente que nisiquiera te ama? es justo esforzarte por un poco de aprecio disimulado o una mirada fría de aprovación?
la respuesta es clara: no.
pero cuesta, cuesta. la asesina tiene más de humana de lo que ella cree, tiene más conciencia de lo que le conviene...
la realidad se planta frente a ella para ser notada. cuan difícil es aceptarla...




sabes? los demás ya lo han descubierto... no es necesario que guardes el secreto...